José María Morelos, Quintana Roo.- A mes y medio de haber iniciado funciones la actual administración, comandada por el alcalde Juan Parra López, el avance que se ha tenido se centra principalmente en el rescate que se le ha dado a los vehículos que se encontraban abandonados, y también el mantenimiento al alumbrado público en las comunidades, destacó la oficial mayor en el municipio de José María Morelos, Rossana Romero Ávila.
Explicó que en cuanto a la acumulación de basura que hubo al inicio de este gobierno, el problema se basaba en la falta de unidades recolectoras. Sin embargo, de los cuatro vehículos que se han destinado para este trabajo, ya se ha habilitado tres, por lo que se puede decir que el servicio de recoja de basura se ha regulado.
Respecto a la contratación de personal, tarea que cumple directamente la dependencia municipal que encabeza, explicó que se está recontratando al personal que había sido despedido y que gozaba de determinada antigüedad.
No obstante, puntualizó que las condiciones económicas en las que se encuentran las arcas municipales, no permite para más, pues recordó que la administración pasada dejó una gran deuda que asciende a más de 51 millones de pesos, repartida entre diferentes acreedores como son el ISSSTE, Fonacot y proveedores en general.
“Hay demandas de ingenieros porque la administración anterior no les pagó. Ese es el problema. El presidente municipal y el tesorero están analizando la situación para poder afrontarla de la mejor manera”, expuso.
Explicó que en cuanto a la acumulación de basura que hubo al inicio de este gobierno, el problema se basaba en la falta de unidades recolectoras. Sin embargo, de los cuatro vehículos que se han destinado para este trabajo, ya se ha habilitado tres, por lo que se puede decir que el servicio de recoja de basura se ha regulado.
Respecto a la contratación de personal, tarea que cumple directamente la dependencia municipal que encabeza, explicó que se está recontratando al personal que había sido despedido y que gozaba de determinada antigüedad.
No obstante, puntualizó que las condiciones económicas en las que se encuentran las arcas municipales, no permite para más, pues recordó que la administración pasada dejó una gran deuda que asciende a más de 51 millones de pesos, repartida entre diferentes acreedores como son el ISSSTE, Fonacot y proveedores en general.
“Hay demandas de ingenieros porque la administración anterior no les pagó. Ese es el problema. El presidente municipal y el tesorero están analizando la situación para poder afrontarla de la mejor manera”, expuso.