Mérida, Yucatán.- Elementos de la Comandancia de Mandamientos Judiciales y Ministeriales de la Fiscalía General del Estado, aprehendieron a Citlaly y Angela Aracelly González Lizama, de 30 y 32 años de edad, respectivamente, acusadas de los delitos de lesiones y ataques peligrosos cometidos en pandilla en contra de su abuela materna.
En cumplimiento a la orden de aprehensión número 32/2014 emitida por el Juez Octavo Penal, los agentes procedieron luego de las graves lesiones inferidas a su familiar, luego de irrumpir de manera violenta en su casa, tras diferencias con quienes habitan en dicho predio.
La denunciante, Dea Edith Cruz, dijo que los hechos tuvieron lugar el 27 de julio de 2013 cuando a las 12:30 horas se encontraba en la casa de su hijo Carlos González Cruz ubicada en la colonia Canul Reyes de Progreso, cuando llegó su ex nuera acompañada de sus hijos, entre los que se encontraban las dos detenidas arriba citadas y su nieto Carlos Jesús González Lizama, quienes a todas luces no llevaban buenas relaciones con su padre.
Los recién llegados comenzaron a escandalizar y tras romper la cadena de la reja con un mazo, armados con palos y un hacha rompieron cristales de puertas y ventanas tratando de introducirse al predio, por lo que desde adentro, el hijo de la mujer trató de evitar que entraran, defendiéndose con un machete, lesionando en un dedo al atacante, que portaba un hacha.
Al llegar los policías municipales, las mujeres dijeron que un sujeto oculto en la casa lo había atacado, procediendo a la detención del mismo.
En la casa, la anciana que observó como lapidaban su predio, trató de escapar por la puerta trasera, donde las citadas mujeres la sujetaron para agredirla a golpes con unos palos, en tanto el citado Carlos le aventaba un bloque en la espalda, pese a los gritos de los vecinos que pedían la dejaran de golpear.
Aunque en principio el sujeto no dejaba entrar a los agentes para que sus hermanas pudieran seguir golpeando a la abuela, los agentes lograron detenerlo y trasladarlo a la cárcel pública, rescatando a la fémina que tras ser valorada por el Ministerio Público se determinó que resultó con aumento de volumen en parietal izquierdo, equimosis violácea con aumento de volumen y escoriación lineal en antebrazos, codos, piernas, muslos y varios dedos de pies y manos, así como dolor en cadera.
Interpuesta la denuncia y corridas las indagatorias, las mujeres involucradas fueron localizadas por los agentes ministeriales cuando se encontraban en la calle 106, a la altura del área del Playón de Progreso y posteriormente puestas a disposición del Juzgado Octavo Penal para el proceso de ley correspondiente.
En cumplimiento a la orden de aprehensión número 32/2014 emitida por el Juez Octavo Penal, los agentes procedieron luego de las graves lesiones inferidas a su familiar, luego de irrumpir de manera violenta en su casa, tras diferencias con quienes habitan en dicho predio.
La denunciante, Dea Edith Cruz, dijo que los hechos tuvieron lugar el 27 de julio de 2013 cuando a las 12:30 horas se encontraba en la casa de su hijo Carlos González Cruz ubicada en la colonia Canul Reyes de Progreso, cuando llegó su ex nuera acompañada de sus hijos, entre los que se encontraban las dos detenidas arriba citadas y su nieto Carlos Jesús González Lizama, quienes a todas luces no llevaban buenas relaciones con su padre.
Los recién llegados comenzaron a escandalizar y tras romper la cadena de la reja con un mazo, armados con palos y un hacha rompieron cristales de puertas y ventanas tratando de introducirse al predio, por lo que desde adentro, el hijo de la mujer trató de evitar que entraran, defendiéndose con un machete, lesionando en un dedo al atacante, que portaba un hacha.
Al llegar los policías municipales, las mujeres dijeron que un sujeto oculto en la casa lo había atacado, procediendo a la detención del mismo.
En la casa, la anciana que observó como lapidaban su predio, trató de escapar por la puerta trasera, donde las citadas mujeres la sujetaron para agredirla a golpes con unos palos, en tanto el citado Carlos le aventaba un bloque en la espalda, pese a los gritos de los vecinos que pedían la dejaran de golpear.
Aunque en principio el sujeto no dejaba entrar a los agentes para que sus hermanas pudieran seguir golpeando a la abuela, los agentes lograron detenerlo y trasladarlo a la cárcel pública, rescatando a la fémina que tras ser valorada por el Ministerio Público se determinó que resultó con aumento de volumen en parietal izquierdo, equimosis violácea con aumento de volumen y escoriación lineal en antebrazos, codos, piernas, muslos y varios dedos de pies y manos, así como dolor en cadera.
Interpuesta la denuncia y corridas las indagatorias, las mujeres involucradas fueron localizadas por los agentes ministeriales cuando se encontraban en la calle 106, a la altura del área del Playón de Progreso y posteriormente puestas a disposición del Juzgado Octavo Penal para el proceso de ley correspondiente.