Tulum, Quintana Roo.- A plena luz del día, los amantes de lo ajeno cometieron sus fechorías al romper el cristal de un taxi, de la ciudad de Cancún, que se encontraba estacionado en las inmediaciones de la plaza artesanal que se encuentra a unos pasos de la zona arqueológica de Tulum y logrando hurtar dinero en efectivo y artículos de valor.
En hechos ocurridos el pasado viernes 2 de mayo, la afectada de nombre Enriqueta Rodríguez, procedente del Estado de México, mostró su molestia luego de que a ella y a su familia les robaron diversos artículos con un valor que ascendería a los 13 mil pesos, aproximadamente.
“Es el segundo día que llevo de vacaciones aquí. Se llevaron el pase de abordar, dos celulares, una tableta, una tarjeta de crédito y dinero en efectivo. Así no regresa el turismo. Es molesto. Uno viene muy confiado y a plena luz del día, con tanta gente, con tanto turismo… No es seguro. Estoy molesta”, expresó.
Elementos de la Policía municipal arribaron al lugar de los hechos para constatar que el cristal en la parte lateral izquierda de la unidad con número económico 5502, de Cancún, estaba totalmente roto, por lo que sugirieron a los afectados que acudieran a la Agencia del Ministerio Público del Fuero Común para dar a conocer los hechos mediante una querella.
En hechos ocurridos el pasado viernes 2 de mayo, la afectada de nombre Enriqueta Rodríguez, procedente del Estado de México, mostró su molestia luego de que a ella y a su familia les robaron diversos artículos con un valor que ascendería a los 13 mil pesos, aproximadamente.
“Es el segundo día que llevo de vacaciones aquí. Se llevaron el pase de abordar, dos celulares, una tableta, una tarjeta de crédito y dinero en efectivo. Así no regresa el turismo. Es molesto. Uno viene muy confiado y a plena luz del día, con tanta gente, con tanto turismo… No es seguro. Estoy molesta”, expresó.
Elementos de la Policía municipal arribaron al lugar de los hechos para constatar que el cristal en la parte lateral izquierda de la unidad con número económico 5502, de Cancún, estaba totalmente roto, por lo que sugirieron a los afectados que acudieran a la Agencia del Ministerio Público del Fuero Común para dar a conocer los hechos mediante una querella.