TULUM, Quintana Roo.- De visita por Tulum con motivo del Segundo Informe de Gobierno del alcalde David Balam Chan, el senador y exgobernador de Quintana Roo, Félix González Canto, habló sobre el mal paso que afronta la economía mexicana en relación a algunos factores que ha tenido que sortear en los últimos meses.
El político cozumeleño aceptó que México no es una excepción a los tiempos difíciles que atraviesa la economía global, lo que significa que hay retos que afrontar en este sentido, sin embargo, estableció que gracias a la solidez de las finanzas, la baja inflación que persiste en el país y las reformas estructurales que han sido aprobadas, se ha logrado que el golpe financiero no sea más fuerte de lo que podría ser.
“Nos ha afectado muy fuerte la caída del precio del petróleo. Esto no depende de México, es algo externo. En más del 50 % disminuyeron los ingresos petroleros del país y esto repercute directamente en los ingresos que tenemos no solamente en las divisas sino en los ingresos públicos, los ingresos que el gobierno utiliza para hacer la obra y los requerimientos que tiene México”, explicó.
“Nos han afectado las políticas monetarias de Estados Unidos donde han anunciado ya los integrantes de su Banco Central (FED) que van a subir las tasas de interés. Se mantienen en el mismo nivel de hace varios años, pero con el puro anuncio que ya hicieron, ya hay un movimiento de capitales de países emergentes, como México hacia Estados Unidos, al ver la expectativa de que la tasa va a subir. Este movimiento de capital es lo que está generando un desequilibrio en el valor de las monedas, principalmente de los países emergentes como México”, agregó.
“Al irse dinero de inversionistas de regreso a EE. UU., obviamente hay una salida de dólares de nuestro país, hay una demanda inusual de dólares o conversión de pesos a dólares para regresarse a EE. UU., y a esto se agrega una caída en los ingresos en los dólares que nos metía el petróleo, que ya están reducidos prácticamente a la mitad”, sentenció.
Insistió en que todos estos factores juntos están originando un fuerte desequilibrio en la economía nacional, que si bien no ha orillado a una crisis, sí ha tenido momentos difíciles como la depresión de la moneda, que de acuerdo al Banco de México, el tipo de cambio se mantiene arriba de los 16.50 pesos por dólar.
El político cozumeleño aceptó que México no es una excepción a los tiempos difíciles que atraviesa la economía global, lo que significa que hay retos que afrontar en este sentido, sin embargo, estableció que gracias a la solidez de las finanzas, la baja inflación que persiste en el país y las reformas estructurales que han sido aprobadas, se ha logrado que el golpe financiero no sea más fuerte de lo que podría ser.
“Nos ha afectado muy fuerte la caída del precio del petróleo. Esto no depende de México, es algo externo. En más del 50 % disminuyeron los ingresos petroleros del país y esto repercute directamente en los ingresos que tenemos no solamente en las divisas sino en los ingresos públicos, los ingresos que el gobierno utiliza para hacer la obra y los requerimientos que tiene México”, explicó.
“Nos han afectado las políticas monetarias de Estados Unidos donde han anunciado ya los integrantes de su Banco Central (FED) que van a subir las tasas de interés. Se mantienen en el mismo nivel de hace varios años, pero con el puro anuncio que ya hicieron, ya hay un movimiento de capitales de países emergentes, como México hacia Estados Unidos, al ver la expectativa de que la tasa va a subir. Este movimiento de capital es lo que está generando un desequilibrio en el valor de las monedas, principalmente de los países emergentes como México”, agregó.
“Al irse dinero de inversionistas de regreso a EE. UU., obviamente hay una salida de dólares de nuestro país, hay una demanda inusual de dólares o conversión de pesos a dólares para regresarse a EE. UU., y a esto se agrega una caída en los ingresos en los dólares que nos metía el petróleo, que ya están reducidos prácticamente a la mitad”, sentenció.
Insistió en que todos estos factores juntos están originando un fuerte desequilibrio en la economía nacional, que si bien no ha orillado a una crisis, sí ha tenido momentos difíciles como la depresión de la moneda, que de acuerdo al Banco de México, el tipo de cambio se mantiene arriba de los 16.50 pesos por dólar.