Tulum, Quintana Roo.- En la ceremonia de premiación del Primer Concurso de Gastronomía Maya, la presidenta del DIF Tulum, Cristina Beatriz Bracamonte de Cobos, indicó que los platillos tradicionales que prepara nuestra gente en las comunidades, además de halagar el paladar, son una fuente de nutrientes y tienen al mismo tiempo características medicinales.
En sentido, dijo ante el jurado calificador, los finalistas y el público que asistió a la degustación de platillos mayas, que otra característica de estos alimentos es que la gente los cultiva en el patio de sus casas, por lo que están al alcance de la familia.
Afirmó que este tipo de cocina continuará desarrollándose porque los alimentos son ricos, nutritivos y medicinales, al tiempo que en recordó que su abuelita, Doña Tina, cocinó en campamentos chicleros y tras instalar el primer restaurante en Tulum basado en comidas de la región, “logró brindarnos educación a todos los nietos”.
En el Primer Concurso de Gastronomía Maya participaron 115 personas y/o familias de la Zona Maya, Zona de Transición y de la Zona Costera del municipio, llegando a la final 16 participantes, de los cuales resultaron ganadores Juan Bautista, de Manuel Antonio Ay, con el platillo pipían verde, y recibió 8 mil pesos; Ignacia Uc May, de Chanchen, obtuvo el segundo lugar el categoría de postres, con un dulce de calabaza, obteniendo 4 mil pesos; y la señora Leticia Uc May con una bebida tradicional, haciéndose acreedora de 2 mil pesos.
El concurso fue organizado por el Ayuntamiento de Tulum y Aldea Zamná, y actuaron como jueces calificadores diez destacados ciudadanos de Tulum, entre los que se encontraba el prestigiado chef ejecutivo Richard Silvester, el pintor y director de la Casa de la Cultura, Giovanni Avashadur, la Directora de Turismo Ana Laura Peña San Román y el Magistrado de Asuntos Indígenas, Javier Reyes Hernández, quienes realizaron tres pruebas regionales para seleccionar a los 16 finalistas que compitieron por el primer lugar.
Es de destacar que algunos platillos sobresalían, como lo es el caso de uno preparado a base de tuza y que es de los más exquisitos dentro de la gastronomía maya, así como los tradicionales preparados a base de maíz y pepita de calabaza, carne y chaya, entre otros ingredientes de la región.
Para Virgilio Gómez Morales, representante de Aldea Zamná, este fue un buen esfuerzo de revaloración de la cultura y las tradiciones mayas, los cuales tienen una gran riqueza que ofrecer al mundo por su sabiduría y subrayó que la gastronomía maya tiene una gran oportunidad de incitar a los turistas por sus efectos sobre la salud.
Richard Silvester, el chef, se dijo sorprendido de la sapiencia de los mayas, porque los concursantes, al momento de exponer la composición de sus platillos, les explicaban no solo los valores nutricionales sino también los medicinales de los alimentos que prepararon, un punto de vista poco conocido en la cultura occidental.
Confesó que para él fue todo un aprendizaje, y aunque ya elabora platillos tradicionales en su quehacer cotidiano, esta experiencia lo inspiró para introducir nuevos platillos. “Es una cocina digna y variada, sensacional y debemos promoverla entre los turistas”.
Ana Laura Peña San Román, directora de Turismo, destacó que en este concurso lograron descubrir platillos que, incluso, se pensaba que ya no se cocinaban, como es el caso del “pepino cat", o algunas aguas hechas a base yuca”.
Destacó que la gastronomía maya está a la altura de cualquiera en el mundo, con platillos originales, que representan una gran riqueza y que se debe promocionar turísticamente.
En sentido, dijo ante el jurado calificador, los finalistas y el público que asistió a la degustación de platillos mayas, que otra característica de estos alimentos es que la gente los cultiva en el patio de sus casas, por lo que están al alcance de la familia.
Afirmó que este tipo de cocina continuará desarrollándose porque los alimentos son ricos, nutritivos y medicinales, al tiempo que en recordó que su abuelita, Doña Tina, cocinó en campamentos chicleros y tras instalar el primer restaurante en Tulum basado en comidas de la región, “logró brindarnos educación a todos los nietos”.
En el Primer Concurso de Gastronomía Maya participaron 115 personas y/o familias de la Zona Maya, Zona de Transición y de la Zona Costera del municipio, llegando a la final 16 participantes, de los cuales resultaron ganadores Juan Bautista, de Manuel Antonio Ay, con el platillo pipían verde, y recibió 8 mil pesos; Ignacia Uc May, de Chanchen, obtuvo el segundo lugar el categoría de postres, con un dulce de calabaza, obteniendo 4 mil pesos; y la señora Leticia Uc May con una bebida tradicional, haciéndose acreedora de 2 mil pesos.
El concurso fue organizado por el Ayuntamiento de Tulum y Aldea Zamná, y actuaron como jueces calificadores diez destacados ciudadanos de Tulum, entre los que se encontraba el prestigiado chef ejecutivo Richard Silvester, el pintor y director de la Casa de la Cultura, Giovanni Avashadur, la Directora de Turismo Ana Laura Peña San Román y el Magistrado de Asuntos Indígenas, Javier Reyes Hernández, quienes realizaron tres pruebas regionales para seleccionar a los 16 finalistas que compitieron por el primer lugar.
Es de destacar que algunos platillos sobresalían, como lo es el caso de uno preparado a base de tuza y que es de los más exquisitos dentro de la gastronomía maya, así como los tradicionales preparados a base de maíz y pepita de calabaza, carne y chaya, entre otros ingredientes de la región.
Para Virgilio Gómez Morales, representante de Aldea Zamná, este fue un buen esfuerzo de revaloración de la cultura y las tradiciones mayas, los cuales tienen una gran riqueza que ofrecer al mundo por su sabiduría y subrayó que la gastronomía maya tiene una gran oportunidad de incitar a los turistas por sus efectos sobre la salud.
Richard Silvester, el chef, se dijo sorprendido de la sapiencia de los mayas, porque los concursantes, al momento de exponer la composición de sus platillos, les explicaban no solo los valores nutricionales sino también los medicinales de los alimentos que prepararon, un punto de vista poco conocido en la cultura occidental.
Confesó que para él fue todo un aprendizaje, y aunque ya elabora platillos tradicionales en su quehacer cotidiano, esta experiencia lo inspiró para introducir nuevos platillos. “Es una cocina digna y variada, sensacional y debemos promoverla entre los turistas”.
Ana Laura Peña San Román, directora de Turismo, destacó que en este concurso lograron descubrir platillos que, incluso, se pensaba que ya no se cocinaban, como es el caso del “pepino cat", o algunas aguas hechas a base yuca”.
Destacó que la gastronomía maya está a la altura de cualquiera en el mundo, con platillos originales, que representan una gran riqueza y que se debe promocionar turísticamente.